martes, 26 de agosto de 2008

Comentario de anoche...



Allá estas tú menos desperada,

con los dos brazos abiertos,
como el cielo de tu Patria,
el mismo pero diferente al de tus ojos,
como el ruido del río que corre desesperado,
tranquilamente,
cierto y meditando,
con esfuerzo mantiene los brazos abiertos,
una mujer que no ceja en su empeño
de ver danzar el baile,
aunque bailando es que se baila.

Por el brillo de sus ojos cargados de lejanía
y el calor de un friolento paisaje corporal.

No es de ninguna manera,
si no de otra,

que no se,
porque es imposible,
pero no se, amiga, no se...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Sí, en el fondo lo sabíamos, lo sabemos siempre...
Solo se trataba de sentarse en el banco compartido y esperar...
Esperar sin prisas, que eran demasiadas, esperar que el instante surgiera, sin empujar los cielos, los relojes, las pausas...
Esperar a que el universo mandara la señal y estar atenta para interpretarlo...
De ayer a hoy solo un instante, pero cómo cambia la mirada!

dulce dijo...

Son muy seductoras las imposibilidades. Y los ojos que tal vez nunca mires, serán los que menos podrás olvidar...
Un abrazo.