!!Agua....agua, mas agua...¡¡

Yo quisiera ser,
si no lo que tu eres lo que serás,
y mas lo que no eres ahora
el tormento que avecina la lluviosa esperanza,
la ternura que posees hasta en tus labios,
tu devota lumbre de esclarecer
de detener alguien sediento, muy sediento.

No cuando alumbres mi obscuridad quedaré ciego,
con tu humildad, tu ignota esperanza que refresca.

Como aquel pozo artesiano
que tú conoces igual que yo,
cerca y al lado de cualquier plano,
donde saboreando la mujer,
esa mujer que eres y no otra
no una que puede ser del oriente medio,
la mujer que escucho
aquella que de tanto grito hizo reventar la garganta,
la que vive gritando,
vive gritando,
la tremenda fase de su existir seco.

Con el recuerdo siempre cantando
la letra de su existencia viva y remota
con avatares cierra su puerta
porque percibe la vida loca.
Loca de hogueras, loca de miedos, loca de sorbos, loca de locos...

Tocando cerca de tí el cansancio que brindas,
desde lejos,
a pesar de que quiera poder tocarlo,
tu propia vida que yergue sobre rocas
en la buenaventura el nanantial sabio
que hasta su mente puso en tu boca
para que en este momento tire a su puerta,
que no es otra cosa, esa no, si no la otra...

Aquello que recuerda cada mañana
cuando la vida parece un pozo
que nunca queda seco sin poder dar agua,
cualquiera de los días duerme la calma
en cada una de las noches, agua mas agua,
con espera de un oriente vivo
que hay que secarlo,
en cada madrugada, agua, mas agua,
no importan ni las guerras de soles y arenas
el pozo solo conoce dar toda su agua.

El agua entera que parte en pedazos
como si fuera trazo por trazo.

Porque el futuro duerme temprano
cuando calienta la madrugada
como ella es, como la han sido,
como es idéntico cada mañana
es solo un pozo, un solo pozo
que guarda el agua.
Que no se cansa,
que no se cansa,
de dar su agua, agua, mas agua.